VIERNES
DE ORGANIZACIÓN Y ALGO MÁS
En contra de su voluntad tina
entró en el café “Encuentro”, Pablo quería que se juntaran ahí para organizar
la fiesta. Ella y Pablo se iban a encargar de las cosa dulces mientras que José
se encargaría de la cena y por último el novio de Anahí sería el responsable
de la bebida.
El
fuerte aroma del café que sintió al entrar inundo su nariz, se sentó cerca de
uno de los ventanales mientras esperaba por sus amigos; estaba mirando la gente
pasar cuando escucho murmullos provenientes de la mesa que se encontraba a su
izquierda, en ella se encontraban unas adolescente, si mal no recordaba eran
las mismas que habían molestado a Mir unos días antes. Sonreían y miraban hacía
algún punto detrás de Tina, sabía que no era necesario darse vuelta para saber
qué era lo que observaban tan atentamente.
-Es
tan lindo…- suspiro una mientras no apartaba sus ojos.
-Esa
ropa le queda tan bien…- acotó otra-¿No le hará frío con esa camisa?
-Si
sólo él quisiera yo lo calentaría- dijo la primera que hablo haciendo reír a
las otras que se encontraban en la mesa, eran en total cuatro sólo una
permanecía en total silencio.
“niñas estúpidas” pensó Valentina sin
saber por qué cruzó ese pensamiento por su cabeza
-Viene
para acá- dijo una entusiasmada
Tina no
sabía porque pero estaba nerviosa, si no fuera porque su amigo quería reunirse ahí
ella sólo hubiese aparecido el día de la fiesta.
-Buenas
tardes- saludo mirándola- aquí le dejo la carta, en unos minutos paso por el
pedido- lo dijo como si no se conocieran, cómo le había pedido Valentina que
hiciera.
-Gracias-
Tina sostuvo en su mano lo que le entrego mientras lo veía irse- así es mejor-
se dijo mientras elegía lo que quería.
-¿Tendrá
novia?- preguntó la que había querido calentarlo.
-Desde
hace una semana que preguntas, no creo que obtengas una respuesta- comento la
que sólo se limitaba a mirar lo que sus amigas hacían
-No
voy a rendirme, hoy voy a dejar anotado mi número de teléfono
-¿No
crees que eso es demasiado?- preguntó la que había hablado unos minutos antes-
creo que es mejor no seguir insistiendo, de esa manera vas a terminar por
cansar a esa persona.
“Qué niñas pesadas”
-Ahí
viene de nuevo.
Tina
por prestar atención a la mesa contigua no había elegido nada, intentó hacer un
paneo general pero no logro ver nada.
-¿Ya
va a ordenar?- preguntó Mir con su tono de voz tan característico
-Un
submarino y dos medialuna- lo miró y entregó la carta- creo que eres popular-
le dijo sin pensarlo señalando la mesa a su izquierda.
A Mir
se le estaba haciendo difícil tratarla cómo si nunca se hubiesen visto pero
sabía que era mejor. Pero ahora ella sonreía.
-¿Qué?-
preguntó
-Eres
muy popular- repitió moviendo sus ojos señalando de nuevo la mesa- cómo un
ídolo sólo hablan de ti.
Mir
sólo subió sus hombros, esas chicas sólo torturaban su existencia y aunque
tenía solución a ese problema no quería hacer uso de eso.
-Ya le
traigo lo que pidió- se dio la vuelta y caminó hacia Martín.
Tina
lo miró, a simple vista se daba cuenta que estaba fastidiado por la situación,
esas adolescentes realmente eran unas desvergonzadas.
Estaba disfrutando de su
submarino cuando llegaron sus amigos.
-Perdón
por la demora- se disculpó José mientras le daba un beso en la mejilla y se
sentaba a su izquierda.
-No te
preocupes estaba entretenida anotando lo que vamos a necesitar- lo tranquilizo
-Hola
Tina- saludo Pablo sentándose a su derecha- perdón se nos hizo tarde, mi padre
me pidió que le comprara unas cosas y eso me demoro.
-Le
estas echando la culpa a mi suegro cuando nada que ver, es verdad que tuvimos
que comprar unas cosas para él, pero fuiste tú el que estuvo más de una hora
dando vueltas- acusó José mientras veía la cara de su novio.
-No te
preocupes, está todo bien, se del tiempo que te lleva arreglar tu persona- dijo
Valentina uniéndose a la broma de José. En ese momento Llegó Mir y los saludó
-Hola
acá les dejo la carta, enseguida paso
-No te
vayas- detuvo Pablo- yo voy a querer lo mismo que Tina.
-Yo un
café con leche- pidió Pablo
-Ya
les traigo, Anahí me pidió que les dijera que apenas pueda va a pasar a
saludarlos- comunicó- ya vuelvo con su orden- dicho esto se retiró. En ese
momento Tina escucho un grupo de suspiros, no hacía falta mirar para saber de
donde provenían.
Mientras
disfrutaban de sus bebidas organizaban todo lo que iban a comprar. En total
eran quince las personas invitadas. Pablo y Tina al no ponerse de acuerdo qué
tipo de torta harían optaron por hacer dos. José que era chef al igual que
Pablo, decidió por arrollados de pollo y de carne. En ese momento Anahí se
acercó a ellos para charlar un rato.
Tina
dejo de prestar atención a sus amigos, que en ese momento charlaban
animadamente, para concentrarse y
escuchar lo que hablaban las niñas a su lado.
-Ahí
viene con la cuenta- dijo la devoradora- esta es mi oportunidad.
“¡Qué pendeja insistente!” pensó mientras veía aparecer
a Mir.
-Aquí
tienen-le entrego el ticket. Una de ellas lo recibió y después de mirarlo le
dio el importe.
-¿Tienes
novia?- preguntó de repente la que no apartaba sus ojos del rostro de Mir- sólo
tienes que responder eso.
-No
hablo de mi vida privada- contesto por vigésima vez, estaba a punto de
retirarse cuando le agarro el brazo.
Tina
que estaba como espectadora no aguantó más y se puso en pie.
-Qué
niña pesada- murmuro mientras se retiraba de su mesa
-¿Tina
a dónde vas?- preguntó Pablo desconcertado siguiendo con la mirada a su amiga.
Valentina
en dos pasos se acercó a la mesa de las pesadas y se colocó al lado de Mir.
-¿Podrías
retirar tu mano de ahí?- su pregunta sonó más a una amenaza, la amabilidad que
la caracterizaba se había esfumado en ese momento- si no quiere responder a tu
pregunta no tendrías que ser tan insistente.
-¿Quién
es usted?- preguntó molesta la que había agarrado a Mir.
-Valentina
no es necesario que…- Mir no pudo terminar la frase al ver el rostro de
Valentina.
-Lo
que están haciendo es acoso ¿sabían?, como sólo son unas niñas no las voy a
denunciar.
-¿Nos
estas amenazando? ¿Quién es usted?- levantó la voz haciendo que Tina se enojara
-Valentina-
intentó Mir de nuevo, quería que se calmara pero era imposible, pudo ver a
Anahí y a José totalmente asombrados en cambio Pablo reía sin poder parar.
-¿Quién
soy?- se acercó a ella y sin preámbulo apartó la mano que todavía seguía en el
brazo de Mir- soy su novia- levantó la voz haciendo que la chica en frente suyo
abriera sus ojos como plato.
-Que
mal gusto- dijo mientras dejaba un papel en la mesa, estaba a punto de retirase
no sin antes decir – aquí dejo mi número, por si cambias de opinión- retiro su
mochila de la silla y se fue junto con la otras adolescentes dejando a
Valentina con la boca abierta.
-¡No
creas que te va a llamar porque no lo hará!- gritó destrozando el papel que
agarro de la mesa, en ese momento se dio cuenta del espectáculo que se había
armado. La cara de asombro de Anahí, José y Mir no tenía precio. Pablo lloraba
de tanto reír y las personas de las otras mesas sólo miraban. Miró a Mir y
sonrió.
-Espero
haberte ayudado- comenzó a caminar hacia su mesa y antes de sentarse se dio la
vuelta y dijo- ahora estamos a mano- y sonrió.
Mir
camino hacia donde estaba Martín mientras sonreía, sin poder creer lo que había
pasado. Se acercó a su compañero que lo miraba con una expresión extraña en su
rostro.
-¿Por
qué me miras así?- preguntó al ver la cara de asombro de Martín.
-Trabajamos
juntos un poco más de un año y es la primera vez que te veo sonreír.
-¿Qué?-
no entendía lo que decía.
-Siempre
vi tus medias sonrisa o tus muecas, esta es la primera vez que
sonríes-explico- y aunque te resulte
raro lo que voy a decir… creo que me enamore- declaro sorpresivamente dejando a
Mir con la boca abierta sin creer lo que oía.
-¡¿QUÉ?!-
GRITÓ Mir pensando que su amigo se había vuelto loco.
-Eres
hermo…- no pudo terminar la frase porque en ese momento Mir cubrió su boca.
-No lo
digas, creo que te volviste loco, ¿cómo te puedes declarar de esa manera? ¿Acaso
no tienes novia?- pregunto mientras veía a Martín mover su cabeza afirmando- le
voy a contar a Anahí lo que acabas de decir.
-¿Qué
dijo?- preguntó Anahí detrás de Mir.
-Nada
importante sólo se está burlando de lo que acaba de pasar- explicó Mir mientras
retiraba su mano de la boca de Martín que en ese momento le guiñaba un ojo.
-Todavía
estoy sorprendida- declaro Anahí mientras tomaba un vaso de agua- nunca vi a Tina
actuar de esa manera, pero me alegro de que lo hiciera, esas niñas son unas
pesadas. Aunque pienso qué te hubieras evitado todo esos comentarios si les
hablabas de ti- le dijo Anahí.
-Te
sacó un peso de encima- comentó Martín sin dejar de sonreír.
-Algo
así- murmuro mientras volvía a su trabajo.